El Programa de la Comisión Europea Safer Internet pretende fomentar un uso seguro de la red, así como concienciar sobre diversas cuestiones, como es la distribución de contenidos ilegales y los contenidos no deseados e incluso dañinos. Cada país participante en el programa lo hace a través de un nodo nacional, que es coordinado por Insafe, el nodo coordinador de la red europea de nodos nacionales. El nodo español de la red europea está a cargo de la asociación sin ánimo de lucro Protégeles. Esta asociación elabora y mantiene diferentes webs temáticas.
Os presentamos la web Centro de Internet segura, que contribuye a "conseguir una Internet más segura para los menores, así como el promover un uso óptimo y más seguro entre ellos de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC)."
La web está destinada a familias, docentes y en general a personas interesadas en el uso seguro y responsable por parte de menores, tanto de la red Internet como de los teléfonos móviles y el mundo de los videojuegos.
Las diferentes campañas a las que podemos acceder desde la página abarcan un gran abanico de temas. Especial mención merecen las campañas destinadas a la prevención de la bulimia y la anorexia, y la lucha contra el acoso escolar en la red. También la destinada a reconocer los cibercentros que proporcionan un entorno seguro para los usuarios y usuarias menores de edad.
Desde el Centro de Internet Segura podemos igualmente acceder a varias redes sociales, como Tuenti y Facebook. También a Twitter y YouTube. La presencia en estas páginas, que son muy usadas por menores, es de gran importancia.
El apartado noticias nos mantendrá al día sobre campañas y noticias relativas al uso seguro de las TIC. En estas campañas se implican desde compañías privadas (telefonía móvil, webs de redes sociales...), hasta todo tipo de instituciones: ayuntamientos, cuerpos de seguridad del estado...
Todas estas acciones ayudan a fomentar la responsabilidad de todos los agentes implicados en las formas en que los menores usan las TIC: instituciones públicas, educadores, familias, medios de comunicación y la industria, sin olvidar a los verdaderos protagonistas, los usuarios y usuarias que son menores de edad.