Los errores en cualquier proceso de medida pueden ser sistemáticos y accidentales o aleatorios.
Los sistemáticos se producen constantemente y pueden ser debidos a un mal calibrado del aparato o a un incorrecto manejo de éste. En el siguiente cuadro aparecen dos ejemplos:
un error sistemático que puede cometerse al elegir la escala de un polímetro y
un error accidental o aleatorio que puede cometerse al medir el volumen del líquido contenido en una probeta.